Sí, al fin… Se fueron las 6 semanas, como si nada. Ver hacia unas semanas atrás y darme cuenta de que la cantidad de cosas que aprendí es tremenda. Hay muchos aspectos que en algún momento tuve la intención e interés de aprender, pero no sabía cómo o por dónde empezar, estaba algo perdida, pero el Programa me dio ese Norte que necesitaba.
Cuando todo comenzó, tenía miedo e incertidumbre, pero ¡Hey! las cosas salieron bien, sé que debo mejorar en muchos aspectos, así que voy por el camino poco a poco.
El final del Programa me da la pauta para seguir adelante, para saber que falta mucho por recorrer, por hacer y por aprender.
De cada Valentino y Valentina puedo tomar algo bueno y aplicarlo en mi vida. Me encontré con personas con ganas de luchar, con grandes ideas y un entusiasmo enorme; también compartí con personas muy distintas a mí, pero se logró sacar la tarea.
Creo que cada elemento del Programa está bien pensado, su equipo es el ideal y saben qué es luchar por un objetivo, se nota que cada quien pasó por un comienzo duro y ahora están en un buen trabajo, en base a lo que estudiaron y lo que les gusta. ¿Qué mejor que eso?
Sí hay algo mejor… Que comparten esos conocimientos ya que entienden lo que significa estar en nuestros lugares.
Todo esto empezó como un «Bueeeno, voy a probar. A ver qué pasa» y terminó como un «¡Madres! Aprendí un montón». Estoy muy agradecida.